El Concejo Deliberante otorgó el “Diploma al Mérito” a Zenona Arciuch de Zabczuk, en ocasión de los 30° aniversario del Consulado Honorario de la Federación Rusa en Misiones.
Fue cofundadora de la Colectividad Rusa Bielorrusa de Misiones, por pedido de la Embajada Rusa de Buenos Aires, en la persona del Cónsul General de la Unión Soviética Pavel Badaiev el 28 de febrero de 1987. El 16 de mayo de 1993 fue nombrada Cónsul Honoraria de Rusia en Misiones cargo que desempeña hasta el día de la fecha. Fue nexo directo en la hermanación de la ciudad de Obera en la ciudad de Molodechno de la República de Belarús el 4 de noviembre de 1994 y con la ciudad de Mozhaisk de Rusia el 7 de octubre de 1999. Recibió medallas de honor otorgadas por distintas Entidades Gubernamentales de la Federación Rusa como así también reconocimientos provinciales y locales.
Sobre el reconocimiento que recibió por estos 30 años del Consulado, Zenona Arciuch de Zabczuk indicó, “para mí es una caricia al alma, porque pude hacer muchas cosas por los descendientes, recibir mucha gente de Rusia, tengo todos los diarios guardados de los periodistas. El primero vino en el año 1991 ya conociendo que acá en Misiones hay un nido de inmigrantes, como decían allá. Ellos no entienden cómo vivimos juntos y no nos peleamos. La necesidad obliga, pero lo bueno es que no se miraba la raza, ni el color, ni religión, ni nada. Entre todos hacían las casas y los galpones, los que son descendientes de inmigrantes saben la historia. No había caminos, solamente unas picadas en el monte”, recordó.
“Me encanta vivir en Oberá, cuando venían los Diplomáticos me decían, acá todo el mundo le conoce y sí, acá todos nos conocemos. Porque formamos una familia, eso somos Oberá”, finalizó la Cónsul Honoraria.
El 8 de enero 2016 presentó su libro “Mis raíces” en la casa del Bicentenario de la ciudad. En el año 2018 presenta su tercer libro “Historia de la colectividad Rusa” 30 años de historia en la colectividad Rusa Bielorrusa de Misiones en el Parque de las Naciones. Durante los 30 años de cónsul tuvo idas y venidas a Rusia, intercambios estudiantiles y académicos con la Universidad de Minsk y La Lomonosov de Moscú y participaciones en congresos y conferencias nacionales e internacionales al crearse en el año 2006 el Concejo coordinador de rusos del mundo.
En el año 1992 se creó el cuerpo consular, lo cual requería su atención y dedicación llevando a la par el trabajo en la Colectividad Rusa del Parque de las Naciones. Por sus años de ayuda a la diócesis de Argentina y por sus 85 años de vida se le otorgó un reconocimiento con la bendición de su santidad Patriarca Kirilo de Moscú y toda Rusia y el obispo Leonid hizo entrega de una Orden de III grado de San Serafín de Sarov.