El ente provincial tomó muestras en salidas de planta potabilizadora de agua y extremos de red y tras los estudios realizados informó a la cooperativa local que el el agua es apta para el consumo.
A raíz de la denuncia de la bioquímica Mariel Koch, quien tiene a su cargo el análisis de la calidad del agua que la Cooperativa Eléctrica Ltda. Oberá suministra al socio, y puso en duda la calidad de la misma, la semana pasada, la Defensoría del Pueblo de Oberá elevó un pedido a Daniel Di Stefano, titular del Ente Provincial Regulador de Agua y Cloacas (EPRAC), para que, como organismo de contralor, verifique técnicamente si el agua provista por la CELO a los socios de Oberá es apta para el consumo humano.
El ente provincial realizó control de calidad en la Ciudad de Oberá a través de un convenio firmado con el Ministerio de Salud de Misiones para garantizar que el agua que consumen los vecinos se ajuste a lo establecido en el contrato de concesión, Código Alimentario Argentino y Organización Mundial de la Salud.
Se tomaron muestras en salidas de planta potabilizadora de agua y extremos de red. Por cada muestra se evalúan más de 10 parámetros físico-químicos y microbiológicos. Además, el EPRAC realizó pedido de informe a la CELO para cotejar controles diarios en planta.
Esta semana, el EPRAC contestó por nota a la defensoría que «se ha instruido un control de calidad inmediata, quedando a la espera de resultados de laboratorios de las muestras tomadas en distintos puntos de la ciudad», agregando que «sin embargo, según los resultados preliminares, el agua es apta para el consumo», asegura el organismo provincial.
Además añade que durante el último mes, no se han registrado reclamos relacionados a la calidad del agua por parte de los socios de la CELO. Por último, señala que en los informes mensuales entregados por la cooperativa, no se han registrado valores que no cumplan con la normativa vigente.