Música, danzas, juegos, comidas típicas y el cruce de brasas, en una noche de tradición
La fiesta de San Juan o el San Juan Ára (“Día de San Juan”, en guaraní) es una de las festividades más populares que tiene el Paraguay, debido principalmente a las comidas típicas y a todos los juegos tradicionales que se desarrollan el 24 de junio de cada año.
Es así, que el sábado 22 se vivió una gran fiesta en la casa típica de la Colectividad Paraguaya, con gran participación de la gente que se acercó al Parque de las Naciones para conocer un poco más de las tradiciones paraguayas.
Allí estuvieron presentes la presidente de la Federación de Colectividades,Marta Wieremiey de Motta, acompañada por el vicepresidente Mario Pizzutti y la Primera Princesa Nacional, Dalma Redlich López.
La celebración es una mezcla de tradiciones, creencias y degustación de variadas comidas típicas. La festividad religiosa se realiza en honor de San Juan Bautista. Es el único santo al que se festeja en el día de su nacimiento, que es el 24 de junio, y no en la fecha de su muerte, que es el 29 de agosto. La fiesta fue introducida a nuestro país por los españoles, en la época de las misiones.
Está muy ligada al fuego, ya que la fiesta religiosa de San Juan tradicionalmente inicia en la noche de vigilia (23 de junio) con músicas, cantos, danzas y juegos alrededor de una gran fogata. Los protagonistas de esta tradición son el sol y el fuego, y según la religión católica, esto se debe al anuncio de nacimiento con una hoguera que hizo Santa Isabel al dar a luz a su hijo Juan, primo de Jesucristo.
Por ese motivo, entre las principales tradiciones que perduran con el tiempo son los juegos que se realizan, pero también el famoso toro candil y el Judas kái o la quema de Judas. En esta oportunidad no faltaron a la celebración.
En cuanto a las comidas típicas, el mbeju, el kavure y el jetereí se llevaron la atención de todos.
La música y el baile siempre están presentes, así que la presencia del ballet Ñasaindy de la colectividad, sumado a otros de folclore argentino, pero también de música árabe y española, sirvieron para el entretenimiento de la gente.
Por supuesto, que el momento destacado fue el cruce de las brasas,
La creencia popular afirma que aquel que crea fervientemente en San Juan, será protegido y no sufrirá daño alguno si atraviesa descalzo el colchón de brasas al rojo vivo. No faltaron los valientes que, con fé, se animaron a cruzar animados por la gente.