La comunidad obereña se reunió, primero para celebrar una misa en su memoria, a un año de su asesinato. Luego marchando por las calles obereñas, pidiendo por Justicia y Paz.
Cerca de un centenar de personas participaron de una marcha donde se pidió justicia por el asesinato de Gladis Gómez. La comerciante que murió baleada por motochorros en su comercio de la calle Piedrabuena y Colombia de la Capital del Monte.
“Hace un año del hecho, y nosotros seguimos pidiendo justicia” manifestó Liliana Gómez hermana de la víctima, presente junto a sus otros hermanos, amigos y familiares. La marcha partió desde el Centro Cívico y entre todos se movilizaron hasta la Plazoleta de la Madre. “Estamos agradecidos porque mucha gente nos acompañó y también pide que los responsables del hecho cumplan la condena que tienen que cumplir» añadió.
Liliana también sostuvo que necesitan saber qué sucedió: “para nosotros es importante tener todos los datos de la investigación, se necesita saber que ocurrió y porqué, para tener paz”.
Entre la muchedumbre, se encontraba el Obispo Damián Bitar, quien señaló: «En medio de una sociedad donde aumenta cada vez más la violencia, la fragmentación, las descalificaciones, las grietas y las divisiones este momento ha sido cargado de emoción, sencillez y de conmoción recordando la vida de Gladis».
Bitar agregó que se pidió justicia a un año de la injusta muerte, que si bien la policía detuvo a dos personas, “sabemos que los caminos son un poco lentos y que ojalá, poniéndonos en el lugar de la familia y de tantas familias que sufrieron pérdidas similares, que esos procesos se acorten y lleguen a la verdad y justicia”.
Además indicó que “este hecho doloroso que tuvo como víctima a una chica sencilla trabajadora e inocente termine como también tendrían que terminar hechos similares que viven tantas personas a raíz del crecimiento de la violencia”.
El hecho
El 2 de marzo del año pasado la catequista y comerciante fue asaltada por motochorros que irrumpieron en su local de calle Piedrabuena.
Cuando llegó la policía, Gómez estaba consciente y relató lo que había pasado. Fue llevada de urgencia al hospital SAMIC local, donde fue atendida por una “lesión con orificio de arma de fuego en la cabeza del lado derecho arriba de la ceja, sin orificio de salida”.
Desde entonces permaneció once días en estado crítico, hasta que el 13 de marzo se confirmó su deceso.
Por el hecho fueron detenidos e imputados Mario Antonio A. (28) y Santiago Miguel S. (27), ambos domiciliados en el barrio Caballeriza, de Oberá, quienes tienen prisión preventiva (en calidad de coautores de “robo calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa dando como resultado homicidio”).
Actualmente, el expediente del caso es analizado por la Fiscalía de Instrucción 1 de esa misma ciudad, que tras dicha revisión debe requerir al juez instructor, Pedro Benito Piriz, que el hecho vaya a debate.
Antes de que el magistrado firme la resolución, se deben aguardar plazos procesales destinados a posibles apelaciones de las defensas.