Malvivientes golpearon y maniataron a los dueños de casa, para luego escapar con dinero y el auto del damnificado. La Policía investiga el hecho sucedido este martes.
Al menos tres delincuentes armados perpetraron en la mañana de este martes un violento asalto a una familia en Oberá, del barrio residencial de Villa Erasmie. Los asaltantes ingresaron por el patio de un vecino a la propiedad ubicada en calle Quintana, amenazaron de muerte y golpearon a los dueños de casa y tras maniatarlos escaparon llevándose dinero en efectivo, computadoras, celulares y el auto del damnificado, que luego fue abandonado cerca de allí.
Los delincuentes primeramente golpearon al dueño de casa, un empresario del rubro informático, tras lo cual amenazaron con cortarles los dedos a su esposa para que cuenten donde estaba la plata. Les exigían a los dueños de la casa la supuesta entrega de 500 mil dólares, que supuestamente estaban guardados en tres cajas de seguridad digital, inexistentes en la vivienda, según declaraciones del damnificado.
La inexistencia de tanta cantidad de billetes de denominación extranjera y de las cajas fuertes fue corroborada luego por el damnificado ante las autoridades policiales. El empresario cree que los asaltantes tenían un mal indicio de ellos y de lo que había realmente en la casa.
No obstante ello, los ladrones escaparon del lugar con cientos de miles de pesos , computadoras, celulares, las llaves de la casa y el auto del damnificado, que luego fue a abandonado en la esquina de calles Pilcomayo y Saavedra, a una cuadra de la avenida 25 de Mayo, a escasas cuadras de la propiedad.
Luego de liberarse de de las ataduras, el dueño de casa formalizó la denuncia policial. Efectivos de la Unidad Regional II de Policía, Comando Radioeléctrico, Investigaciones y Policía Científica trabajaron en el lugar del hecho.
La Policía montó un amplio operativo de búsqueda de los asaltantes, que serían cuatro; tres entraron en la casa y uno, les habría estado esperando afuera.
Los investigadores levantaron muestras en la vivienda del damnificado, los portones de la propiedad, en el auto sustraído y rastrean cámaras de seguridad en la zona, para obtener algún indicio de los delincuentes prófugos.